Joaquín Chaluisa: “las políticas del Gobierno se han orientado a destruir el sistema de salud pública”
Joaquín Chaluisa es dirigente de la Federación de Trabajadores de la Salud de Pichincha (FETSAPI) y de la Organización Sindical Única Nacional de Trabajadores del Ministerio de Salud Pública (OSUMTRANSA), gremio que nuclea cerca de 16.500 trabajadores de la salud a nivel nacional. Ambos sindicatos han sido claves para la defensa de la salud pública, la denuncia contra los despidos tanto de trabajadores como de funcionarios del Sistema de Salud Pública, así como blanco de la represión y persecución política antes y después del Paro Nacional de Octubre.
La presente entrevista permite comprender desde los actores de “primera línea” el deterioro sistemático de la salud pública, las condiciones precarias a las que miles de trabajadores de este sector, debido a la constante neoliberal del Gobierno, se enfrentan día a día en medio de la emergencia sanitaria.
CP: ¿Qué sucedió para que el Sistema de Salud Pública, tenga tantas dificultades para atender la emergencia sanitaria por el COVID 19?
JC: Hace más de diez años el Ministerio de Salud Pública (MSP) apoyado por el Gobierno central, logística y económicamente - bajo el paradigma del buen vivir -, estuvo en la capacidad de crear un sistema solidario, equitativo y universal de salud, con un modelo de atención integral y una red nacional a nivel de los Centro de Salud públicos. Esto permitió fortalecer tres niveles, el primero, de atención primaria, que involucra a los centros, subcentros de salud, hospitales básicos, en el segundo, hospitales de mediana capacidad, y en el tercero, hospitales de especialización.
Una vez llegado el nuevo gobierno cambia esta política, prima el capital sobre el ser humano, dando paso a la destrucción del MSP. ¿Cómo empieza? Con la complicidad de muchos sectores, desde el mismo MSP, el Ministerio de Gobierno, cuando se aceptan las imposiciones del FMI, el despido de miles de funcionarios y trabajadores de la salud pública.
Le pongo un ejemplo, en el primer nivel se concentra el 80% de la demanda de los ecuatorianos, y a este, que es el nivel preventivo, es al que han apuntado a destruir, porque el capitalismo no piensa socialmente, no le interesa un sistema de salud pública, le interesa una sociedad enferma, para que esa demanda vaya hacia el sector privado.
CP: Entonces, ¿han sido las políticas del Gobierno las que explican la crisis del Sistema de Salud Pública?
JC: Sí, las políticas del Gobierno se han orientado a destruir política y presupuestariamente el sistema de salud pública, beneficiando a los privados y a las grandes transnacionales farmacéuticas.
CP: Hace poco más de un año se despidieron a más de 2000 trabajadores salubristas, ¿qué fue lo que sucedió?
JC: En el 2019 más de 2800 trabajadores parte de este gran sistema de salud, principalmente del primer nivel, fueron despedidos.¿Qué ha significado esto? Le pongo el siguiente ejemplo, usted en la práctica puede ver el rebrote del dengue en la costa, las unidades de control vectorial, encargadas de este tema, fueron desmanteladas bajo el argumento que se iba a coordinar directamente con los GAD´s y el Ejército, pero eso nunca se hizo.
Los despidos a los que hace referencia en los primeros días de marzo de 2019, ya venían dándose desde antes, son el pan de cada día, de cada mes.
CP: ¿Cuáles son los motivos con los que se justifican los despidos?
JC: Hay diversos motivos, diversos pretextos, trabajadores que vienen con contratos de 4, 5, 6 o más años, con contratos ocasionales, provisionales, pero que no se han convocado a los concursos; ahí donde se empieza a despedir.
Sin ningún informe técnico que justifique los despidos, el MSP, Ministerio del Trabajo, han procedido a despedir a nuestros compañeros. Esto debe conocerlo la opinión pública.
CP: ¿Cómo explica dentro del proceso de despidos la salida de los médicos cubanos?
JC: Cuando se rompe el acuerdo de cooperación con Cuba, salen 400 médicos especialistas, que se suman a los anteriores despedidos. Se finiquitó este acuerdo por compromisos políticos, por desidia, porque la posición de la ultra derecha y de los médicos de élite era que no pueden haber cubanos aquí.
Hasta el día de hoy ninguna de estas partidas han sido reemplazadas, por dos motivos, los especialistas prefieren o trabajar en el sector privado o fuera del país porque ganan más.
CP: Recuerdo que en el marco de esta serie de despidos ustedes se movilizaron en abril pasado a la Plaza Grande, ¿qué sucedió?
JC: Nosotros comenzamos a una serie de movilizaciones y llegamos a una serie de acuerdos, como la reintegración, ya que no existía justificación técnica alguna, de nuestros compañeros que había sido despedidos. fue tal, como nos dijo la Ministra en su momento, que el pedido del Gobierno era que se saquen 5.000 trabajadores, luego 3000, hasta que finalmente fueron 2800.
Salimos a las calles, salimos a protestar, se dio una reunión con delegados de la Presidencia de la República por medio del Ministerio de Gobierno, en ese entonces aún era la Secretaria de Gestión de la Política, el MSP, y se redactó un acta donde se iba a levantar un informe técnico; se reintegraron de 150 a 200 compañeros en situación de vulnerabilidad, luego otros 1.519 también fueron reintegrados, sin embargo, muchas de las partidas de los 2.800 trabajadores despedidos no se restituyeron, el Ministerio de Finanzas no lo hizo, no nos dió la cara.
Incluso, llegamos a un acuerdo para que no se eliminen los distritos de salud de la zona 9, donde tenemos 9 distritos que pretenden ser reducidos a dos grandes distritos, lo significa despidos y reducción en la capacidad de atención, así digan lo contrario.
CP: Ese día también fueron reprimidos...
JC: Coincidencialmente el Presidente estaba reunidos con algunos alcaldes del país, estábamos concentrados en la Plaza Grande, fue un anticipo de lo que sucedió de octubre, nosotros vimos las fauces de la represión.
Se golpeó inmisericordemente a madres de familia, trabajadores despedidos, trabajadores que salimos a rechazar los despidos, tuvimos cuatro presos y numerosos heridos.
CP: Pese a los recortes y despidos, el Sistema de Salud Pública sigue funcionando, ¿cómo es posible?
JC: El sistema claro que sigue funcionando, pero en una condiciones muy difíciles. Funcionarios que hacen dos o tres tareas, que no pueden salir a vacaciones, que se les suspenden días libres, que doblan turnos. En estas condiciones es que llega la pandemia, con un sistema de salud debilitado en todos los niveles.
Pero lo fundamental es que si no hay los recursos para enfrentar esto, lo que estamos es tratar de evitar que apenas existan más contagios, más muertos.
CP: ¿Qué significado tiene para usted la renuncia de la ex Ministra Andramuño?
JC: No es mérito de la señora ex Ministra renunciar y salir a decir que no ha tenido los recursos, dias antes nosotros habíamos pedido que ante la Comisión de Trabajo y Salud de la Asamblea Nacional comparezca la Ministra y el Viceministro de Salud. Los dos dijeron que no tenían ni un solo problema económico, que ya tenían todo, y eso que ya estábamos con alerta de la pandemia.
CP: ¿Cree que el reciente cambio de Ministro de Salud traerá mejoras?
JC: En un mes no se va a recuperar la institucionalidad del MSP, tres años pasaron destruyendolo. Ahora mismo deben darse grandes líneas para enfrentar la pandemia, pero todos hemos visto que la iniciativa que ha evitado el crecimiento de la pandemia en Quito y Pichincha principalmente, es la iniciativa del Alcalde antes que del propio MSP, que en teoría es la primera autoridad en estos casos.
CP: ¿Qué es lo que el Gobierno debería hacer para fortalecer en estos momentos la salud pública?
JC: Nosotros no vemos que este Gobierno quiera solucionar los problemas que viene acarreando hace tres años el Sistema de Salud Pública. Calculamos solo 20 millones para pagar el reintegro de los despedidos, pero no tenemos esperanza cuando en medio de la crisis, prefieren pagar 325 millones a los tenedores de bonos de la deuda externa.
¿Qué es lo que deberían hacer? Hemos insistido, y hasta hemos dado propuestas para enfrentar la crisis, ¿por qué no se a los empresarios por las dudas que mantienen con el Estado?, ¿por qué se prefiere pagar la deuda externa en este momento tan crítico? Se debería dar contratos definitivos a los funcionarios, reintegrar a los despedidos con contratos indefinidos, y si falta personal, garantizar mismos derechos para los que vengan.
Si no hay una posición seria de parte del Gobierno para atender la emergencia sanitaria quiere decir que las cosas están claras, no hay una voluntad para solucionar esto.
CP: Finalmente, ¿en qué condiciones de seguridad y atención se enfrentan al COVID 19 los trabajadores salubristas?
JC: El tema de de los trajes de protección es un problema permanente, no es que ahora por el coronavirus se destapa el problema, se carece de todo en absoluto. Se trata de una cuestión básica el uso de mascarillas profesionales, guantes, trajes especiales. Somos un sector de riesgo, de contaminación, permanentemente, independientemente del coronavirus. Todos los trabajadores de las salud, desde los profesionales hasta los funcionarios y obreros, trabajan en condiciones precarias, pero la respuesta hasta el día de hoy ha sido negativa. La emergencia sanitaria nos sorprende desarmados, por eso tenemos compañeros infectados.
Nosotros rechazamos esta falta de solidaridad, esta política con los trabajadores del MSP, que son a los primeros que deberían proteger del virus para poder atender de una manera más eficiente y oportuna.