De "Congresos" FEUE y otros cuentos
Durante el 18 y 19 de mayo, las instalaciones de la Universidad Central del Ecuador fueron utilizadas, sin ningún permiso ni reparo, para realizar el "47 Congreso Nacional" de la FEUE “Nacional”. Si bien motivo de alegría debería ser para los y las estudiantes, que las organizaciones que tienen la misión de representarlos se reúnan, en esta ocasión no resulta nada satisfactoria tal convocatoria, puesto que esta nace desde los sectores que históricamente han servido para desmovilizar, deslegitimar, entorpecer, y utilizar para la politiquería más sucia, las sentidas reivindicaciones del movimiento estudiantil.
El extinto MPD (ahora Unidad Popular), cadáver insepulto de la política, se aferra socarronamente a la universidad pública, tal es así que el mal llamado congreso de FEUE “Nacional”, que se reunió con el respaldo de escasas filiales a nivel nacional, contó con poca participación estudiantil. Varios jóvenes fueron obligados, desde el decanato de la Facultad de Filosofía, a asistir a lo que esta organización denominó Congreso.
Tal evento se enmarcó y giró en torno al debate sobre la educación pública, debate que quizá resulte estéril hasta que no tomen en cuenta de que ellos, la FEUE “Nacional”, son uno de los más grandes problemas que tiene la educación en el país. Alineándose y allanándose a la agenda del poder y su discurso, el evento contó con la participación del honorable Julio César Trujillo, regente del "todo poderoso" CPCCS-Transitorio. Dejando clara la relación servicial que este gremio mantiene con el Gobierno de turno.
El Congreso, además de elegir al nuevo presidente de la FEUE “Nacional”, léase un nuevo siervo del ex MPD, pretendió exponer sus propuestas de reforma a la LOES. Cobijados con la consigna de la autonomía universitaria - de la cual somos fervientes defensores y consientes partidarios - se busca perpetuar su poder al interior de las Instituciones de Educación Superior (IES); no es más que una estrategia para convertir a la universidad en su nicho de perpetuación política y supervivencia, atentado contra el derecho a la calidad educativa y poniendo en riesgo la formación profesional de quienes, en unos cuantos años saldrán a construir sociedad y país.
Bajo la consigna de la "descorreizar" la educación, la FEUE “Nacional” no duda en pactar con cualquier sector que destile odio en torno al proceso de la Revolución Ciudadana. En el marco de esta estrategia, su dirigencia se reunión con Javier Santos, Subsecretario de Gobernabilidad, tras marchar por el centro de Quito el día 18 de mayo.
Otro elemento crítico resultante de las declaraciones de la FEUE “Nacional”, gira entorno a la acreditación y categorización universitaria. Si bien el proceso es perfectible, el procedimiento faculta conocer la realidad académica de las IES, facilitando el diagnóstico de sus falencias con el fin de adoptar estrategias y medidas que favorezcan la calidad de la academia; en teoría. Según las recomendaciones al proyecto de reforma a la LOES planteadas por la FEUE “Nacional”, es necesario que este proceso sea llevado por las IES, con completa autonomía. En este sentido, se pretende dar apertura a la mediocridad académica y administrativa, se pretende volver a montar el círculo vicioso en dónde las IES son juez y parte a la hora de examinar su nivel académico, transformarse en instituciones con fines de lucro, etc. Discurso que avizora el retorno de las “universidades garaje”.
Los elementos aquí mencionados conforman la arena en la que se disputará el control de la educación pública, donde un partido político en agonía, a través de sus tentáculos estudiantiles, aplaude los movimientos de un Gobierno, que tras las conflictivas reformas a la LOES, dio luz verde al pacto corporativo entre poderes sobre la voluntad de los y las estudiantes, quienes por el momento, débilmente organizados, contemplan como la educación se transforma de práctica emancipadora, a elemento que perpetúa las relaciones de poder. Urge por lo tanto, la emergencia de un movimiento estudiantil crítico y combativo.