Reivindicando derechos, sembrando conciencia
El uso y consumo de cannabis ha sido y es un tema estigmatizado por el discurso dominante de los medios de comunicación tradicionales, caracterizados por una narrativa que criminaliza a los consumidores y estereotipa a otros actores sociales que promueven el aprovechamiento responsable e integral de esta planta en diferentes aspectos. Discutir y reflexionar sobre esta “problemática” implica complejizar el entendimiento de la misma a partir de la diversificación de voces, experiencias y dinámicas colectivas vinculadas a la cultura cannábica.
El primer sábado de mayo desde 1999 se lleva a cabo la Marcha Mundial de la Marihuana en más de 700 ciudades del mundo con la participación de diversos actores sociales que promueven la despenalización del cultivo, la tenencia, el consumo de cannabis así como otras aplicaciones de la misma tomando en cuenta sus propiedades terapéuticas e industriales. En Ecuador diferentes organizaciones sociales han promovido la realización de la marcha teniendo como punto de partida el año 2009. El objetivo de esta manifestación colectiva se centra en reivindicar los derechos de los consumidores, pero no solamente de quienes hacen uso recreativo de la marihuana sino también de quienes promueven el aprovechamiento de sus propiedades medicinales e industriales.
El pasado viernes 04 de mayo se llevó a cabo la Marcha Mundial de la Marihuana Ec. – 2018 con la participación de organizaciones como Ecuador Cannábico, Defensores Pro Cañamo, CRIC, Cultiva Derechos Ecuador, Ambato Cannábico, entre otros colectivos bajo la consigna “Cultiva Medicina”. La movilización estuvo distribuida en tres bloques: medicinal, industrial y recreativo, con la finalidad de promover la participación de otros actores sociales y de integrar a la ciudadanía en la misma. A pesar de que el bloque mayoritario era el de consumo recreativo este año evidenció la importancia de construir una dinámica de integración que permita generar conciencia frente al uso y consumo de cannabis. Jóvenes, mujeres, estudiantes, activistas, pacientes, campesinos, artesanos, entre otros fueron partícipes de esta manifestación que tenía como punto de llegada la Plaza Grande para presentar una propuesta al gobierno nacional lo cual se vio limitado por la fuerte presencia policial y el impedimento de ingresar a la plaza y entregar la propuesta construida colectivamente por las organizaciones promotoras.
La apatía generalizada del aparataje institucional estatal así como de gobiernos seccionales y del sector privado motiva a que quienes promueven la despenalización del cannabis repiensen sus dinámicas de acción colectiva para reivindicar sus derechos y cultivar conciencia frente a una temática tergiversada por los intereses de diferentes sectores de poder reflejados en el discursos de los grandes medios de comunicación.
