Se confirma tortura

acab
Martes 29 de Abril de 2025

Una nueva reconstrucción de los hechos confirma lo que se suponía desde un principio: Ismael, Nehemías, Josué y Steven fueron torturados por los militares que los detuvieron el 8 de enero de 2024, antes de ser presuntamente abandonados desnudos en una carretera. Sus cuerpos mutilados y calcinados fueron encontrados semanas después de la desaparición forzada, en Taura. Existía la presunción de tortura porque lo que les pasó a los 4 niños de las Malvinas, no es un hecho aislado, ni en el país ni en el continente ni en el mundo. A lo largo de la historia, el Estado ha tomado un giro autoritario y terrorista como respuesta a la crisis de hegemonía que causa la crisis estructural del capitalismo.

Cuatro de los militares implicados en el caso de desaparición forzada de los niños, describieron las vejaciones a las que sometieron a los menores. Básicamente militares confesando sus crímenes y los de sus compañeros. En estos momentos es inevitable recordar al Ministro Loffredo en su fantoche disculpa pública, amenazando a juezas y demás funcionarios públicos, pero sobre todo amenazando a las organizaciones de defensa de Derechos Humanos y a la organización popular que denuncien el terrorismo de Estado. Es buen momento para volver a ver a Loffredo mentir en cadena nacional, distorsionando la realidad para influir en la opinión pública. Su objetivo: normalizar los crímenes de Estado.

Hay 46 denuncias de desapariciones forzadas a manos de las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional. Hay más denuncias de desapariciones forzadas con Daniel Noboa que con León Febres Cordero en la era del Escuadrón Volate y el SIC-10. Es decir, nos estamos enfrentando a una intensidad de las fuerzas represivas pocas veces experimentada por este pueblo.

El giro autoritario que tomó Noboa desde el 9 de enero de 2024, sometió a un shock sin precedentes a la población, que rápidamente se polarizó. En mayor medida la población dio un giro hacia una derecha más agresiva que rápidamente logra la fascistización del sentido común. Esto no es un fenómeno nacional, sino occidental. Por otro lado, una porción de la población logra reconocer los abusos del Estado y la clase política, intuye que es sistémico pero no necesariamente llega a la izquierda, que adicionalmente se presenta fragmentada y con una organización precaria.

Esta es la realidad de la República Bananera: desempleo, precarización, ínfimo acceso a salud y educación, violencia estatal y violencia criminal. Marzo volvió a cerrar con el record del mes más violento de la historia del país, después de que febrero  fuera el mes más violento de la historia, después de que enero fuera el mes más violento. Así sucesivamente. La cifra de niñxs y adolescentes desaparecidxs aumentó en un 88%. De lxs menores desaparecidxs, el 70% son niñas y adolescentes mujeres. ¿Qué está pasando con las niñas en este país? ¿Qué país es este para las infancias? ¿Qué es lo que sucede cuando las infancias son agredidas sistemáticamente en una sociedad? Imposible no regresar a ver a Palestina. Valga mencionar: si pueden hacer eso con lxs wawas palestinxs, pueden hacer eso con todxs nuestrxs wawas. Viva Palestina libre.

No cabe ni la menor duda de que el fenómeno de la violencia ha pasado a dominar absolutamente todos los aspectos de la vida en el Ecuador. Un rompimiento constante de récords en muertes violentas -el primer trimestre del 2025 fue el más violento jamás registrado, con al menos 2.361 asesinatos-, más del 60% más que en el mismo periodo en 2024. A este paso, el Ecuador cerraría el año actual con más de 10.000 muertes violentas, entre los 10 países con mayor tasa de homicidio a nivel mundial. Frente a este panorama, no resulta sorpresa alguna que más del 50% de la población se iría del país, si solo pudiese hacerlo. Destino migrar: el viejo-nuevo Ecuador, el eterno país del no futuro.

Adicionalmente, la violencia no solo muestra su cara en forma de asesinatos y ejecuciones, sino que se traduce también en un panorama generalizado de precarización, miedo y shock, en violencia política, en inaccesibilidad al sistema de justicia, a una pauperización de la vida material y simbólica de la clase trabajadora. El discurso del supuesto conflicto armado interno, mismo que reclama no decenas o centenas, sino cintos de vidas de las clases populares -por acción o inacción-, sigue siendo hegemónico. A pesar de haberse demostrado un crimen de Estado, una acción premeditada, facultada por el estado de guerra en el que se mantiene al colectivo, y legitimada por un Estado que desata el discurso del enemigo interno, en la opinión pública existe un grado importante de justificación y legitimidad frente al crimen contra Ismael, Nehemías, Josué y Steven. Esto se llama fascistización, y es muy peligroso.

Recordemos que Daniel Noboa -reelecto presidente- es a su vez es Comandante de las Fuerzas Armadas del Ecuador. Que él mismo habla de un Narcoestado, que a su vez refuerza la lógica antisubversiva del enemigo interno, que hace perfilamiento racial y se reafirma en el aticomunismo. En este sentido, la forma de Estado que se encuentra impresa en el ADN –énfasis en la ironía- de la República Blanqueada del Ecuador, está encaminada a desatar la violencia más frontal en contra de todo aquel que no conciba como digno incluso del derecho a la vida. Los “monitos emprendedores” de Moreno, han sido convertidos en los “niños sicarios” del noboismo. Cuanto dolor y desprecio reparten los ricos.

Cuando una sociedad legitima crímenes de lesa humanidad, como en Palestina de forma masiva, o también en Ecuador, entonces esa sociedad se deshumaniza. Y cuando se deshumaniza, el tejido social se convierte en caldo de cultivo del fascismo. El fascismo, lejos de pensar en los regímenes históricos y derrotados de Mussolini, Hitler o Franco, se encuentra en la fibra misma que constituye el Estado como tal. Pedir el exterminio de los mal llamados “angelitos” por la extrema derecha, además de endosar y legitimarlo, es de por sí una lógica fascista. Cuando una porción importante de la sociedad apoya una limpieza social, clamando por militarización y celebra asesinatos sistemáticos entre poblaciones empobrecidas y racializadas, el fascismo se instituye. Es imperante, urgente e inclusive emergente hacer un trabajo sistemático de des-fascistización de todos los espacios sociales. Está en nuestras manos combatir por todos los medios el ascenso del fascismo, trabajo de hormiga.

Nunca olvidar: los pueblos del mundo ya derrotamos a la bestia fascista, así que más temprano que tarde, lo volveremos a hacer. La lucha entre clases como motor de la historia, se encuentra más viva que nunca. Y en el Ecuador no cabe duda: la culpa es colectiva.

Categoria